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¿Arte sinónimo de diseño?

El diseño gráfico es interdisciplinario y por ello el diseñador necesita tener conocimientos de otras actividades como la fotografía, dibujo artístico, dibujo técnico, tipografía, tecnología, comunicación, entre otros. Aplicando todos estos conocimientos, el diseñador gráfico transforma un mensaje lingüístico en una manifestación gráfica.

Esta pieza gráfica provoca y transmite en las personas diversas emociones y sentimientos en ellos, ya sea por la composición, el color u otro elemento. El arte provoca estas mismas emociones u otras distintas en quienes la observan dependiendo de su perspectiva de vista. De esta forma tanto el diseñador como el artista requieren de inspiración y creatividad para crear emoción en su diseño y poder trasmitir ideas y pensamientos

El diseño está orientado a dar soluciones a problemas específicos que parten siempre de una demanda del cliente, lo cual llega a cumplir a través de normas y métodos. El arte por lo contrario no responde a esquemas ni a problemas específicos, no cumple una función claramente definida ni entiende de métodos.  

En conclusión el diseño es funcional a diferencia del arte que es subjetivo, pero el diseño utiliza el arte como un medio para materializar expresiones que apelan más a la emoción de quienes lo observan.

Rol del Diseñador Gráfico como Comunicador Social

Aunque un diseñador gráfico es un comunicador visual y un periodista es un comunicador social, en muchas ocasiones los dos trabajan en un mismo campo laboral, uno y otro están ligados y no pueden estar subordinados. Ambas ramas son capaces de construir una visión y comprensión del mundo.

Erróneamente se suele pensar que el diseñador concibe únicamente imágenes que se rigen a resolver problemas meramente estéticos y técnicos para materializar o hacer tangible un mensaje. Pero para ‘solucionar este problema estético’, el diseñador debe construir un relato, este debe ser capaz de comunicar un concepto basado en el estudio de la vida social de su público objetivo, debe tratar comprender tanto las ideologías, carencias, necesidades o debilidades que éstos tengan, esto le permitirá crear productos funcionales y mensajes persuasivos y eficaces que pueda generar los cambios conductuales que buscamos en ellos.

El poder que tiene la imagen en la sociedad es muy importante y transcendental, ante lo cual debe ser utilizado como una herramienta productiva para la comunicación social, por ello es elemental que el diseñador cumpla con su función social y rol en la sociedad, involucrándose de mejor manera con los miembros de una comunidad quienes serán los que recepten un mensaje que debió haber sido previamente investigado y estudiado.

Neurodiseño

La sociedad gracias al desarrollo tecnológico ha cambiado o modificado ciertas de sus actividades, es así que en el diseño se han incorporado nuevas herramientas, una de ellas es la neurociencia. Este nuevo paradigma se ha denominado,  Neurodiseño, el cual a través de su aplicación ayuda a potenciar de forma científica y mucho más humana la práctica del diseño.

Las tecnologías han facilitado el manejo de información y la realización de actividades repetitivas necesarias en el diseño, pero no han contribuido de manera significativa al mejoramiento de los procesos creativos y a la generación de ideas innovadoras en la solución práctica de problemas de diseño. De esta forma se ha logrado entender que lo importante son las ideas y no las herramientas, ya que éstas son sólo recursos tecnológicos que permiten la representación de proyectos y de ideas que intervienen fundamentalmente en la presentación final de resultados, no así en el proceso "creativo" del diseño ni en su concepto. 

La aplicación del Neurodiseño permite entender el pensamiento, lenguaje y conducta del ser humano para el desarrollo y evaluación de productos de diseño que favorezcan al usuario, mejoren su condición humana ante cualquier beneficio económico, político o de otra índole. El conocer la naturaleza humana posibilita el desarrollo de propuestas de diseño mucho más objetivas, que ayudan a mejorar la experiencia del usuario y es por esta razón que resulta necesario que académicos, investigadores y profesionales del diseño impulsen el neurodiseño en la práctica.

Originalidad en el Diseño

En primer lugar es necesario definir ¿Qué es la Originalidad?. La originalidad es la capacidad de pensar independientemente y de forma creativa, pero no tiene necesariamente que ver con hacer algo nuevo, sino con hacer algo propio. Pero, ¿se puede ser completamente original? No precisamente ya que todos dependemos de todos, todos estamos constantemente observando nuestro alrededor. Y más aun, con el bum del Internet que ha traspasando las barreras y fronteras que nos separan, con una increíble facilidad, ahora podemos observar diseños de cualquier lado del mundo. Esto unido con la televisión, revistas, películas entre otras cosas, es lo que nos rodea día a día.

En realidad, las nuevas ideas son nuevas formas de ver, transformar, resaltar o deteriorar lo que ya existe. Aunque esto, claro, dentro de un diccionario ya no sería exactamente la definición de originalidad.

Es importante que los diseñadores seamos originales ya que siempre son los diseños originales los son más eficaces. Esto se puede lograr a través de la investigación, estar atento con lo que pasa en el mundo, considerar todas las posibilidades en el proceso del diseño, esforzándonos en crear nuestros propios métodos creativos, adaptando las técnicas y los estilos que nos fueron impartidas en las aulas de clase.

Algunos consejos para crear diseños originales, puede ser el ir en contra de la corriente, aplicándolo  como una solución totalmente inesperada en nuestros diseños. Debemos utilizar no sólo un sitio de alimentación visual, inspiración e instrucción creativa, sino muchas opciones que nos permitan expandir nuestras ideas, leyendo temas enfocados a la tecnología, nuevas tendencias, entre otros. Es necesario también, participar en seminarios, charlas y eventos enfocados al diseño y cada una de sus ramas. 

El Valor del Diseño

Se han preguntado ¿Como valuar al diseño o como fijarle un precio al mismo? O ¿Cómo cobrar nuestros honorarios profesionales? Ante este cuestionamiento debemos diferenciar entre lo que es: Valor y precio.

En ningún momento valor significo “$” dinero, en aspectos económicos, sino por el contrario es la esencia que el producto mismo muestra y que es apreciado por el observante dejando un sentimiento de gusto o rechazo al mismo. El precio por el contrario, es el valor monetario que se le asigna a dicho producto o servicio.

En el Diseño Gráfico, el Valor del Diseño de una Identidad corporativa, radica en la Imagen que le da a una empresa, por lo que, el valor del Diseño radica en el Manejo de la Imagen, en todos sus aspectos, aunque en muchas ocasiones no se consideran importantes ó valiosos. Pero es este diseño el que hará transmitirá un sentimiento en quien use y compre el producto o servicio, que de satisfacción y no solo de estatus.

Ante esto es importante que en primer lugar, como profesionales del diseño seamos conscientes y hagamos evidente el valor que nuestro trabajo aporta al entorno social. Debemos empezar por entender que los diseñadores no solo vendemos gráficos, y mucho menos diseños bonitos; por el contrario, junto con la ideas se vende conocimiento, experiencia y sensibilidad, elementos que se transforman en soluciones de comunicación exitosas  para las marcas, productos o negocios, y que van directamente a impactar en la percepción que el público se hace de ellos, aportándoles valor extra.

Recuerden que el diseño no es solo una actividad de comunicación, sino un factor económico decisivo en el crecimiento de organizaciones.

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